Por: Carlos Alberto Monge Montaño.
Para gobernar se precisa firmeza, pero también mucha flexibilidad y paciencia”. Herni Dominique Lacordaire (1801 – 1861) Predicador francés.
El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla finalmente optó por un hombre de su confianza para la Secretaría de Gobierno.
Descartó a los que tienen experiencia política, requisito que parece fundamental, a los de mayor trayectoria en esa dependencia y a las mujeres.
Finalmente es Raúl Zepeda Villaseñor el que asumió el enorme reto de procurar la gobernabilidad en un estado extraordinariamente complejo, en la recta final de la administración estatal que suele ser el periodo más complicado, a lo que se suma una disputa entre las 2 tribus hegemónicas de Morena, donde sin duda, cobra relevancia el responsable de la política interna.
Después de barajarse varios nombres, incluido el de la actual secretaria de Educación, Gabriela Molina Aguilar, quien por algunos momentos parecía favorita ante el discurso gubernamental de que “es tiempo de mujeres”, pero, Ramírez Bedolla reiteró que eso es pura demagogia.
Zepeda Villaseñor es licenciado en Administración de Empresas, se ha desempeñado como secretario particular de Ramírez Bedolla desde el 2018, cuando era diputado local y durante todo lo que va de este gobierno.
Además, fue subgerente de Operaciones y Ecología en la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas de julio de 2012 a junio de 2018.
Se le reconoce como una persona muy cercana al gobernador Alfredo Ramírez, hombre de familia, que aprende rápido, disciplinado, trabajador y organizado.
Otro elemento que pudo ayudar en las valoraciones del mandatario es que tiene buena relación con Carlos Torres Piña, al que llega a suplir, que ahora es el fiscal general de Michoacán y que seguramente seguirá pendiente de la política interna.
Pero, Zepeda Villaseñor carece de experiencia política y liderazgo en el gabinete.
Finalmente es Raúl Zepeda Villaseñor el que asumió el enorme reto de procurar la gobernabilidad en un estado extraordinariamente complejo, en la recta final de la administración estatal que suele ser el periodo más complicado, a lo que se suma una disputa entre las 2 tribus hegemónicas de Morena, donde sin duda, cobra relevancia el responsable de la política interna.
Después de barajarse varios nombres, incluido el de la actual secretaria de Educación, Gabriela Molina Aguilar, quien por algunos momentos parecía favorita ante el discurso gubernamental de que “es tiempo de mujeres”, pero, Ramírez Bedolla reiteró que eso es pura demagogia.
Zepeda Villaseñor es licenciado en Administración de Empresas, se ha desempeñado como secretario particular de Ramírez Bedolla desde el 2018, cuando era diputado local y durante todo lo que va de este gobierno.
Además, fue subgerente de Operaciones y Ecología en la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas de julio de 2012 a junio de 2018.
Se le reconoce como una persona muy cercana al gobernador Alfredo Ramírez, hombre de familia, que aprende rápido, disciplinado, trabajador y organizado.
Otro elemento que pudo ayudar en las valoraciones del mandatario es que tiene buena relación con Carlos Torres Piña, al que llega a suplir, que ahora es el fiscal general de Michoacán y que seguramente seguirá pendiente de la política interna.
Pero, Zepeda Villaseñor carece de experiencia política y liderazgo en el gabinete.
No conoce de negociaciones con grupos sociales, menos con los que suelen ser conflictivos y de los que abundan en la entidad. Además, es conocido su carácter explosivo, voluble e intrigoso.
Su hermana, Gabriela Zepeda Villaseñor es la directora del Comité de Adquisiciones del Poder Ejecutivo.
Si no hay más sorpresas, Raúl Zepeda tendrá más de 2 años al frente de la secretaria de Gobierno, tiempo suficiente para dejar su huella y demostrar sus habilidades. A menos que sólo vaya a ejecutar lo que Torres Piña le indique desde la Fiscalía.
Por lo pronto, su primer mensaje público lo hizo a través de redes sociales donde señaló que:
“¡Vamos a ser un equipo que escucha!, abierto siempre al diálogo, anteponiendo los acuerdos y disponibles 24/7 para todos los asuntos pendientes.
Llegamos con disposición, humildad y todas las ganas de trabajar lo mejor posible por seguir transformando a Michoacán.
Gracias al equipo de la Segob por su entrega; Michoacán tienen en ustedes hombres y mujeres comprometidos y ustedes tienen un gran liderazgo y ejemplo en el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla”.
Ojalá le vaya bien, Michoacán se lo merece. Veremos.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.
