Gana morena pero no Torres Piña
Octavio Ortiz/Moreliactiva
Morelia, Michoacán.- Han pasado poco más de 3 semanas de las elecciones que otorgaron un aplastante triunfo a morena y sus candidatos. El manto de López Obrador sigue protegiendo a muchos, a demasiados, incluso a impresentables sin embargo hubo lugares donde imperó la cordura y uno de ellos fue Michoacán, concretamente en Morelia porque ni toda la fuerza del estado, ni los programas sociales pudieron hacer que triunfara el parachense Carlos Torres Piña.
Su fracaso se puede entender desde varias vertientes pero una de ellas es que la gente tiene memoria y no aceptó que uno de los mayores críticos de López Obrador fuera el alcalde la capital.
El mismo que lo repudió, que criticó los programas sociales y ridiculizó el esquema de seguridad propuesto por el presidente de la República pretendía bajo el manto del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, convertirse en el presidente municipal de Morelia.
El de Paracho hizo campaña durante más de un año. Sus propios compañeros de partido lo exhibieron y denunciaron pero no pasó nada, no obstante la soberbia y arrogancia de ambos los dejó en el camino.
Ahora Bedolla lo vuelve a rescatar: primero lo catapultó como candidato al senado y no le alcanzó, amagó y logró la candidatura en Morelia y ahí los morelianos lo exhibieron.
Ambos lloran, patalean y acusan fraude pero omiten decir que todos los candidatos por los cuales se votó en Morelia -incluidos los de morena- les pasaron por encima. Alfonso les ganó con más 40 mil votos.
Torres Piña, no ganó en ningún distrito.
Al revisar los números se desprende que las y los morenistas repudian a Carlos Torres, por su abierta e histórica confrontación con Andrés Manuel López Obrador y el propio morena, hay mucha evidencia de ello y ha circulado en redes ampliamente.
Solo así se entiende el hecho de que la gente vote por un priista recién convertido como Marco Polo, pero que a diferencia del de Paracho, no hay evidencia histórica de una confrontación pública y sistemática con el fundador de morena; o que los morenistas prefieran votar por la porteña Nallely Pedraza, pero no por quien tanto los ha agraviado como lo ha hecho Torres Piña. En el distrito local 10 que es donde viven más morenistas, es donde el voto de castigo y repudio hacia el crítico de AMLO es mayor.
El anti obradorista regresa mucho más débil que hace 3 años a la Secretaria de Gobierno, en detrimento de la gobernabilidad del estado. Eso es responsabilidad de Alfredo Ramírez Bedolla, quien ha elevado desproporcionalmente el costo del contrato social que los michoacanos tienen con un político ineficaz que no ha dado muestras de capacidad en el gobierno, y que en dos ocasiones recientes los habitantes del estado lo reprobaron en sus pretensiones de ser senador y presidente de la capital del estado; de nada han servido los cientos de millones de pesos del presupuesto público que han gastado en este personaje gris.
Pero ante tan irracional persistencia de darle permanente acceso a las arcas públicas es inevitable la pregunta: ¿quién manda aquí?
